Cables RCT ofrece a sus clientes diversas alternativas de embalaje, adaptadas a sus necesidades y a las características de cada producto.
El embalaje habitual de los cables más gruesos, la bobina de madera, se complementa con las bobinas ligeras o de contrachapado, más apropiadas para cables de menores dimensiones.
Paro ahora ya se pueden utilizar las bobinas de plástico, especialmente adaptadas para un uso reiterado y en ambientes más agresivos, como puede ser una obra, son una excelente alternativa para metrajes pequeños o intermedios.
Las secciones de cable más demandadas son 0.50, 0.75 y 1 en carretes de 200 metros y 1.5 y 2.5 en carretes de 100 metros.
Las bobinas de plástico se presentan en dos colores (negro y verde) y en dos dimensiones: carrete negro 180x85x60 o carrete negro / verde 160x85x60.
Aplicaciones de las bobinas de plástico
Este empaquetado es apropiado para distribuidores y/o instaladores que manipulen el material normalmente sobre estructuras fijas, facilitando su extracción.
Para facilitar la trazabilidad del producto y su manipulación logística, todas las bobinas de plástico van siempre etiquetadas de manera individual con código de barras EAN13.
Además de esta solución, el fabricante tiene otras interesantes opciones según las necesidades
- Los grandes consumidores de cables de instalación y cableados interiores utilizan habitualmente el sistema BoxedWire que permite la extracción del material con un gesto sencillo, sin necesidad de utillajes o soportes especiales. Es la solución para los grandes y muy grandes usuarios en taller.
- Para los cables de menor diámetro, fabrican rollos retractilados de manera individual de diversos metrajes, empezando en 50 m para consumidores preocupados por la comodidad y facilidad de uso y llegando a rollos de 2.000 m, muy demandados por grandes consumidores y usuarios de cables en taller.
- Los carretes de cartón con núcleo metálico, especialmente utilizados en el mercado inglés, son una buena solución para facilitar el manejo y corte de cables ligeros.
